En el interior del hatchback Clase A, uno se sumerge en un abrazo de comodidad. Las transiciones suaves entre el panel de instrumentos, la consola central y la tapicería de las puertas crean un agradable efecto envolvente. La suspensión bajada y ajustada de manera deportiva, junto con la dirección afilada, ofrecen sensaciones emocionantes al conducir.